Con la total convicción de nuestra misión sindical y con la urgencia de recabar información pertinente para refrendar con las autoridades que correspondan la situaciones que nos aquejan, muchas por años de arrastre sin solución, la Directiva Nacional de AFUNPRO -Marcela Torres (presidenta), Juan Ulloa (tesorero) y Hugo Gutiérrez (secretario)- se trasladó a la sureña ciudad de Punta Arenas para reunirse con los socios y funcionarios de los centros de atención de la CAJ en la Región de Magallanes y la Antártica Chilena.
Luego de reunirse, los dirigentes pudieron constatar en terreno las mejoras por gestionar, apoyar y colaborar con lo que no ha sido gestionado adecuadamente y respecto de temas en los cuales existe alguna problemática de interpretación de la ley o bien, simplemente, nula gestión.
Entre los temas abordados se inscriben los relacionados con la dotación (falta de mediador o abogado), capacitaciones que no se pueden realizar por falta de personal, ausencia de valoración de los funcionarios y funcionarias, carencias en proyecto “Mi Abogado” (que debe necesariamente derivar desde ODAM y Puerto Natales), dificultades para mediación, entre otros.
En materia de Familia, el problema se repite: un solo trabajador para implementar planes de retorno (sin secretaria), situación que también está presente en el Centro de Atención a Víctimas (CAVI), dada la ausencia de personal y la imposibilidad de contratar por la baja oferta remuneracional.
Estas carencias también están presentes en el PMA (14 profesionales para 136.000 kilómetros cuadrados) y ODAM (incumplimiento de duplas), entre otros problemas de suficiencia.
Nuestra Directiva Nacional acudió a una Asamblea, donde se impuso de la realidad dramática de Magallanes, y sostuvo una reunión con el Director Regional, Alejandro Donatti, para avanzar en soluciones que dignifiquen el trabajo, que ni siquiera cuenta con un edificio institucional ni se responden las demandas con peticiones concretas de mejoras.
Como AFUNPRO, no descuidaremos a nuestros funcionarios y funcionarias de Magallanes, “hasta que la dignidad sea una costumbre”.
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